domingo, 9 de marzo de 2014

A veces te recuerdo...

Aunque haya pasado ya tanto tiempo hay días donde te recuerdo. Pero te recuerdo de maneras diferentes, como aquellas tardes de verano, donde el calor fundía mis pensamientos, o aquellos inviernos, donde temblaba fuera de tu casa esperando a que llegarás de donde fuera que estuvieras, a veces te recuerdo...

No sé yo si era tu manera de ser, o lo que en su momento dijiste, pero llegue a extraviarte dentro de mis pensamientos, de mis ideas poco creativas y de mi manera de ver las cosas, ninguna de éstas tenían sentido, pero eso no impedía que yo te las compartiera, pero tu siempre sonreías al oírlas y después me llamabas tonto.

Los mejores días eran los que no nos veíamos, porqué hacían que el simple hecho de que al vernos finalmente; siendo tan solo durante un par de minutos; los hacían especiales de cierta manera, y eso ayudaba a entender el ambiente de esto, un amor de niños.

Y a veces te extraño... No sé yo si era tu uniforme de la escuela, o tu cabello suelto, tal vez el hecho de que me preparabas la cena aún cuando no debías de hacerlo, de como siempre te interesabas por mí, sabes, extrañarte es complicado, conlleva muchas cosas, de las cuales muy pocas son comprensibles, las demás son solo bocetos de lo que un día fueron sentimientos y emociones.

Pero supongo que todo es mejor así, no me he sentido triste ningún día, y recordarte me hace bien, me hace sentir vivo y querido, de cierta forma.

viernes, 10 de enero de 2014

Recuerdos hermosos

Alguna tarde de algún día de algún verano de lo que fue mi juventud, toda las tardes y cada ocasión mi madre cantaba, siempre sus canciones de trova y protesta, tal vez eso y el hecho de que yo tuviera el corazón a la izquierda hayan forjado lo que ahora son mis ideales y principios.

A mi madre, a quien algún día le podré devolver todo lo que me ha dado, algún día...

¿En que estarán convertidos mis viejos zapatos, a donde fueron a dar tantas hojas de un árbol? ¿Por dónde están las angustias que desde tus ojos saltaron por mi, a dónde fueron mis palabras sucias de sangre de abril? ¿A dónde van ahora mismo estos cuerpos que no puedo nunca dejar de alumbrar, a caso nunca vuelven a ser algo? ¿A caso se van, y a dónde van?

Madre, ya deja de preocuparte por las cosas, y concéntrate en lo simple, tu felicidad :)